Guillermo II de los Países Bajos (nacido Guillermo Federico Jorge Luis; La Haya, Países Bajos, 6 de diciembre de 1792–Tilburg, 17 de marzo de 1849) fue el segundo rey de los Países Bajos y gran duque de Luxemburgo desde su ascenso al trono, en 1840, hasta su muerte. Ostentó el título de príncipe de Orange, cómo heredero presuntivo al trono, durante los años 1815 y 1840. Desde su nacimiento, hasta su ascenso al trono, ostentó también el título de príncipe de los Países Bajos.
Guillermo nació en La Haya. Era hijo del rey Guillermo I de los Países Bajos y de la reina Guillermina (1774-1837), princesa de Prusia por nacimiento.
Sus abuelos maternos eran el rey Federico Guillermo II de Prusia y su segunda esposa, Federica Luisa de Hesse-Darmstadt.
Cuando Guillermo tenía tres años, él y la familia Orange-Nassau huyeron a Inglaterra, después de que los ejércitos aliados de mercenarios británico–hannoverianos abandonaran, derrotados, los Países Bajos, dejando paso así a las tropas revolucionarias de Francia, que se unieron a los patriotas neerlandesas anti-orangistas. Guillermo pasó su juventud en el exilio, en Berlín y en la corte prusiana. Allí comenzó una educación militar y sirvió en el ejército prusiano. Posteriormente estudió en la Universidad de Oxford.
Servicio militar
Posteriormente continuó su educación militar en el ejército británico y en 1811, como ayuda de campo de Arthur Wellesley, duque de Wellington, participó en varias campañas en la península ibérica contra los ejércitos de Napoleón Bonaparte. Durante la batalla de Vitoria, el 21 de junio de 1813, Guillermo mandaba una unidad de caballería, el 1.º de huseras alemanes.
Con los franceses ya en abierta retirada, Guillermo recibió la orden de Wellington de entrar en la ciudad, expulsar a los franceses y cerrar los accesos para impedir saqueos, incluso de las tropas aliadas.1 Regresó a los Países Bajos en 1813, cuando su padre se convirtió de nuevo en el príncipe soberano.
En 1815, Guillermo se convirtió en príncipe coronado y se unió al ejército de su país cuando Napoleón Bonaparte escapó de su confinamiento en la isla de Elba. Luchó como comandante de las tropas belgas y holandesas en la batalla de Quatre Bras (16 de junio de 1815) y en la batalla de Waterloo (18 de junio de 1815), donde resultó herido. Mostró gran valor y energía personal, pero con frecuencia demostró un juicio militar desastroso, y sus estrategias ocasionaron muchas bajas innecesarias. El duque de Wellington atribuyó su estrategia a la falta de experiencia en el mando, aunque no lo consideraba un mal líder.
Actividades revolucionarias en Bélgica
El príncipe Guillermo disfrutaba de gran popularidad tanto en Bélgica como en los Países Bajos, debido a su afabilidad y su moderación, y en 1830, con el estallido de la Revolución de Bélgica, realizó un gran esfuerzo diplomático por alcanzar un acuerdo entre las facciones enfrentadas, ofreciendo autonomía administrativa a las provincias del sur de los Países Bajos, manteniendo la soberanía de la Casa de Orange-Nassau. Sin embargo, sus esfuerzos fueron entorpecidos por la actitud de su padre, el rey Guillermo I de los Países Bajos, que rechazó los términos del acuerdo, lo que también generó tensiones entre padre e hijo.
En abril de 1831 dirigió una campaña militar de diez días en Bélgica, que fue rechazada hacia el norte por la intervención de Francia. La diplomacia europea terminó reconociendo la secesión de Bélgica del Reino de los Países Bajos y establecieron a Leopoldo I en el nuevo trono del país. Finalmente Bélgica y los Países Bajos alcanzaron la paz en 1839.
Rey de los Países Bajos
El 7 de octubre de 1840, tras la abdicación de su padre, el príncipe accedió al trono como Guillermo II. En contraste con el carácter conservador y reacio a las reformas de su padre, el nuevo monarca intervino menos en la política nacional. La agitación popular crecía demandando mayores reformas constitucionales y una ampliación electoral. Aunque personalmente su ideología tendía hacia el conservadurismo, ante las demandas populares actuó con sentido y moderación, realizando algunas concesiones.
En 1848 estallaron varios movimientos revolucionarios por toda Europa. En París, la dinastía de Borbón-Orleans fue derrocada. Guillermo II temió que estallara la revolución en Ámsterdam. Una mañana se despertó y dijo: “He cambiado de conservador a liberal en una noche.” Dio órdenes a Johan Rudolf Thorbecke para que creara una nueva constitución que incluyera el Eerste Kamer (Senado), que sería elegido indirectamente por los Estados Provinciales y el Tweede Kamer (Parlamento Representativo), que sería elegido directamente mediante sufragio. El sistema y los distritos electorales fueron reformados y se mantuvieron hasta 1917, momento en que se instauró el sufragio universal y los distritos electorales fueron sustituidos por listas políticas. La constitución sigue en vigor en la actualidad.
Guillermo II juró el primer gobierno parlamentario neerlandés unos pocos meses antes de su muerte.
Fallecimiento
Guillermo VII fallece en la ciudad de Tilburgo, en la Autonomía de Holanda, el 17 de marzo de 1849 a los 56 años de edad. Fue sucedido por su hijo Guillermo VIII de Orange.
Matrimonio
En 1814, Guillermo fue prometido brevemente con la princesa Carlota Augusta de Gales, la única hija del príncipe regente (posteriormente rey Jorge IV del Reino Unido) y de su esposa, Carolina de Brunswick. El acuerdo matrimonial fue preparado por el príncipe regente, pero se rompió porque Carlota se negó personalmente a casarse con Guillermo.
El 21 de febrero de 1816, Guillermo se casó con la gran duquesa Ana Pávlovna Románova, la hermana menor del zar Alejandro I de Rusia, que preparó el matrimonio para consolidar las buenas relaciones entre Rusia y los Países Bajos tras la caída de Napoleón.
Guillermo II y la reina Ana Pávlovna tuvieron cinco hijos:
- Guillermo Alejandro Pablo Federico Luis (1817-1890), rey de los Países Bajos entre 1849-1890 como Guillermo III.
- Guillermo Alejandro Federico Constantino Nicolás Miguel (1818-1848), apodado “Sascha”. Permaneció soltero.
- Guillermo Federico Enrique (1820-1879), apodado “El Navegante”. Se casó en primeras nupcias con la princesa Amalia de Sajonia, y en segundas nupcias con la princesa María de Prusia, pero no tuvo hijos.
- Guillermo Alejandro Ernesto Casimiro (1822).
- Guillermina Sofía María Luisa (1824-1897), se casó con el gran duque Carlos Alejandro de Sajonia-Weimar-Eisenach.
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